3 motivos para invertir en compliance | Ethikos Global
Una pregunta recurrente que se da en el ámbito empresarial es ¿Qué porcentaje del presupuesto debería invertirse en el compliance? Y la respuesta de expertos es “Todo lo que sea necesario”. La inversión no es grande si se piensa en los ahorros que se generan y los capitales que pueden atraerse y producir más beneficios y valor.
Pero, la pregunta cero podría ser ¿Cuál debería ser tu inversión en compliance sin importar el tamaño o giro de negocio de tu empresa? Los expertos Elisa Turullols y Richard Lee conversaron sobre este tema y te compartimos tres puntos esenciales:
1. Es un imán para atraer capitales
En el mundo actual de los negocios, el compliance es una de las condiciones que logra que a una empresa se le otorgue más valor en transacciones comerciales. De hecho, fondos de capital privado no invierten en empresas sin programas de cumplimiento.
En pocas palabras, es un valor estratégico para atraer capitales. En este sentido, podemos considerar varios escenarios, pero mencionamos algunos:
- Si se está negociando una venta de la empresa, en el valor de la transacción incidirá no tener contingencias pendientes en temas ambientales, laborales, entre otros. Un programa de cumplimiento eficiente evitará tener hallazgos y por lo tanto costos que podrían afectar el precio de la empresa.
- Ante una fusión, contar con un programa y una cultura de compliance representará ahorro y facilitará la implementación, lo cual es siempre atractivo para quienes invierten.
- Una de las formas de calcular el riesgo que podría enfrentar una empresa que se quiere adquirir, es calcular el valor presente neto de los posibles flujos de efectivo futuros. Todo lo relacionado con cumplimiento, ética y valores que asegure cumplir con la normativa laboral, ambiental e impositiva; asegura que esos flujos están más seguros en el tiempo.
Es una tendencia mundial que se exijan parámetros estandarizados antes de hacer una inversión, por ejemplo grandes instituciones están teniendo en cuenta los criterios ESG (Environmental, social and governance). Estos miden cómo afectan las actividades de la empresa al medio ambiente, qué repercusión tienen las actividades de la compañía en la comunidad en materia laboral, de derechos humanos y cuidados sanitarios, entre otros; y cuál es el actuar respecto del buen gobierno de la empresa y sus directivos.
Goldman Sachs ha identificado que fondos de empresas con una alta calificación en los criterios ESG, poseen un valor de mercado un 10-20% más alto que otros fondos de organizaciones que no han implementado ninguna acción para cumplirlos.
2. Es un atractivo para un consumidor más consciente
Los clientes actuales poseen un gran interés por conocer y tener más visibilidad y trazabilidad sobre qué tipo de productos y servicios están consumiendo. Los valores son muchas veces los que inclinarán la balanza para decidir sobre una u otra marca, porque ahora se consumen marcas con las que se comparten valores.
Comunicar los valores de mi compañía se convierte en una tarea vital. Tus clientes no solo quieren conocerlos sino sobre todo saber cómo los aplicas en toda tu cadena de producción. Un programa de cumplimiento prioriza los valores organizacionales y busca empalmarlos en el día a día de la compañía.
3. Es un escudo para la reputación
No puedes evitar que tu empresa enfrente desafíos para la reputación. Pero sí puedes protegerla con un programa robusto de compliance. Por ejemplo, si enfrentas una crisis de reputación porque un colaborador actúo de forma antiética, pero posees un mecanismo de denuncia, puedes demostrar que tienes un plan de formación y que la empresa posee una política de cero tolerancia a la corrupción; entonces será más sencillo demostrar que esa mala acción de un colaborador no es una práctica corporativa.
Tener todo muy documentado es la mejor defensa ante cualquiera de estos riesgos contra la buena fama. Y una buena reputación es también un excelente incentivo para los inversionistas.
Panelistas
Elisa Turullols
Experta en Gobierno Corporativo y Compliance
Autora del libro Guía del buen gobierno corporativo
Richard Lee
Director de grupo IDC
Master of Business Administration y Master en Economía