Compliance y manufactura inteligente: el dúo dinámico para la eficiencia total
La manufactura inteligente se encuentra en el corazón de la transformación industrial. En un entorno donde la productividad y el cumplimiento normativo no son opcionales, sino indispensables, las empresas enfrentan el desafío de integrar la ética y las normas en sus operaciones diarias.
Master Minds Week exploró cómo el compliance puede ser una herramienta estratégica con base en la experiencia compartida por dos expertos:
- Rosario Maris es una auditora con amplia experiencia en riesgos y cumplimiento financiero. En su rol como oficial de cumplimiento de Grupo AG, ha liderado la implementación de un sistema de gestión antisoborno, promoviendo una cultura de ética en la organización.
- Joel Alfredo Salazar Aguila, gerente de desarrollo humano en Corporación Lancasco, aporta su experiencia en transformación organizacional y digitalización de procesos. Con un enfoque en valores, ha liderado iniciativas que fortalecen la transparencia y la agilidad en la toma de decisiones, reduciendo costos y mejorando la eficiencia operativa.
Una fusión vital para el éxito
Imagina un mundo donde cada paso en el proceso de manufactura está optimizado no solo para generar resultados, sino también para garantizar que todo se haga bajo los estándares más altos de ética. Esta es la promesa de la manufactura inteligente con un enfoque en compliance: menos riesgos, más eficiencia y una reputación empresarial que inspire confianza.
En palabras de los expertos, el compliance no es un “nice to have”, es un “must have” que impacta directamente en la sostenibilidad de las empresas. Pero ¿cuáles son las claves para integrar el compliance en la manufactura?
Estas son algunas de las recomendaciones de los expertos:
1. Promover una cultura de ética y cumplimiento:
Rosario destaca que una cultura ética cimentada permite que los colaboradores actúen de manera proactiva. Por ejemplo, en Grupo AG, los empleados están empoderados para reportar incumplimientos sin temor, gracias a un código de ética que prioriza la excelencia y la innovación.
Una cultura sólida también contribuye a la reducción de incidentes y fomenta la mejora continua, lo que se traduce en procesos más ágiles y efectivos.
2. Aprovechar la tecnología para la gestión de riesgos:
Joel enfatizó la importancia de digitalizar procesos y utilizar plataformas para monitorear el cumplimiento en tiempo real. Esto no solo mejora la transparencia, sino que también agiliza la toma de decisiones al reducir la dependencia de controles manuales.
La tecnología permite detectar irregularidades antes de que se conviertan en problemas graves, incrementando la capacidad de respuesta y minimizando impactos financieros y operativos.
3. Simplificar procesos para reducir riesgos:
Identificar actividades que no generan valor y eliminarlas puede ser clave para optimizar operaciones. La simplificación no solo reduce costos, sino que también disminuye la posibilidad de errores humanos y asegura un mejor cumplimiento de las normativas.
4. Involucrar al liderazgo:
Tanto Rosario como Joel coinciden en que el liderazgo debe ser el principal vocero del cumplimiento. Los líderes que modelan comportamientos éticos inspiran a sus equipos a hacer lo mismo, creando un entorno donde las normas se respetan y los objetivos se alcanzan de manera sostenible.
5. Capacitar y empoderar a los colaboradores:
Los programas de entrenamiento que refuerzan comportamientos éticos y transparentes son muy importantes. La formación constante asegura que todos los niveles de la organización comprendan las políticas y estén alineados con los objetivos estratégicos.
El papel de la tecnología en el compliance
La tecnología está redefiniendo cómo las empresas gestionan el cumplimiento. Desde plataformas digitales que automatizan auditorías hasta sistemas de monitoreo en tiempo real, las herramientas tecnológicas permiten una supervisión más efectiva y una reducción de costos. Invertir en tecnología no es solo una opción, sino una necesidad para las empresas que buscan mantenerse competitivas en mercados cada vez más regulados.
Ejemplos prácticos de impacto
- Trazabilidad mejorada: Lancasco ha adoptado sistemas de trazabilidad que no solo aseguran la calidad de sus productos, sino que también facilitan auditorías regulatorias, ahorrando tiempo y recursos.
- Gestión de riesgos proactiva: Grupo AG ha implementado plataformas internas para reportar condiciones inseguras y mejorar la seguridad industrial. Estas medidas no solo protegen a los empleados, sino que también reducen costos asociados a accidentes laborales.
- Mayor confianza del mercado: Ambas organizaciones han fortalecido sus relaciones con proveedores y clientes al demostrar transparencia y compromiso con altos estándares éticos.
Compliance: el camino hacia la excelencia operativa
El compliance no solo se trata de evitar sanciones; es una herramienta poderosa para impulsar la eficiencia y la innovación.
Si deseas llevar estas ideas a la práctica, comienza por:
- Involucrar a los líderes en la promoción de la cultura ética.
- Adoptar tecnología para monitorear y gestionar el cumplimiento.
- Simplificar procesos cuestionando su relevancia y alineándolos con los riesgos reales.
- Fomentar un entorno donde los empleados se sientan empoderados para actuar con transparencia.
- Implementar programas de capacitación continua que aseguren la alineación con las metas estratégicas.
Con un enfoque correcto, las empresas pueden no solo cumplir, sino liderar en un mercado global cada vez más exigente.
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